El biólogo Rupert Sheldrake ha publicado una serie de cápsulas en el sitio Lumenz Network en las que explica los conceptos centrales de su trabajo, incluyendo la telepatía, los campos morfogenéticos y la relación entre la ciencia y la espiritualidad. La teoría de Sheldrake de la resonancia mórfica se basa en la noción de que existe un campo de información compartido o una memoria inherente a la naturaleza. Este concepto es una continuación en la biología del inconsciente colectivo, acuñado por el psicólogo Carl Jung.
Sheldrake explica que Jung generalizó el concepto de Freud de que existía actividad mental consciente llevándolo del individuo a la especie. Esto es, una memoria colectiva de la cual todos tomamos, y que contiene patrones comunes de experiencia o arquetipos, los cuales, como mitos transpersonales se repiten en nosotros. Jung, por ejemplo, descubrió que personas sn Suiza soñaban con mitos directamente originarios de algunas tribus africanas, los cuales no tenían forma de conocer.
“Creo que la memoria colectiva en los humanos se debe a lo que llamamos resonancia mórfica, un principio de memoria colectiva en todas las especies. Jung tenía el problema de cómo explicar la manera en que una persona en Suiza puede heredar los mitos de una tribu africana sin un vínculo genético”, dice Sheldrake. Y añade que la resonancia mórfica aplica a todas las especies y  todos los animales se alimentan de una memoria colectiva y contribuyen a ella. Esta memoria colectiva no se ubica en el cuerpo, sino en la naturaleza misma, difundida como un campo y es sintonizada a través de lo que llama resonancia mórfica.